La Comisión Europea ha presentado un proyecto para aumentar el coste de solicitar un visado Schengen en un 12% en 2024, alegando el impacto de la inflación en toda la Unión Europea (UE).
Si se aprueba tras un periodo de comentarios públicos que finaliza el 1 de marzo, las revisiones aumentarían el precio estándar del visado de 80 a 90 euros para los adultos y de 40 a 45 euros para los niños de 6 a 12 años.
Primera revisión de las tasas del visado Schengen en tres años
El visado Schengen permite a sus titulares viajar libremente por los 27 países europeos durante un máximo de 90 días en un periodo de 180 días.
Según las normas del espacio Schengen, las tasas se reevalúan cada tres años en función de la tasa de inflación general de la UE.
Dado que la inflación ha alcanzado recientemente máximos históricos de dos dígitos, la Comisión afirma que las subidas propuestas reflejan "la necesidad de responder al aumento de los costes en las economías de la UE".
La organización subraya que cualquier ingreso generado por los visados Schengen se destina directamente al funcionamiento de los sistemas informáticos asociados, el personal y la infraestructura consular.
Los países que no cooperan aumentan los costes de los visados Schengen
En la propuesta se introducen aumentos porcentuales más significativos para los países considerados poco cooperativos en lo que respecta a la devolución y readmisión de ciudadanos que permanezcan ilegalmente en el espacio Schengen.
Para estas naciones, la UE prevé elevar el precio del visado de 120 a 135 euros para las solicitudes estándar, lo que representa un aumento de casi el 13%.
La tasa se dispararía más de un 12% para los países que no cooperen, pasando de 160 a 180 euros por solicitud de visado.
Los proveedores externos de visados Schengen pueden igualar la subida de tasas
La Comisión también ha planteado la idea de permitir que los organismos externos que tramitan las solicitudes de visado Schengen en nombre de los Estados miembros aumenten sus tarifas de servicio.
Actualmente, las agencias de visados y tramitadores similares pueden cobrar hasta la mitad de la tasa estándar.
Según las últimas propuestas, el máximo absoluto que podrían cobrar los tramitadores externos aumentaría marginalmente de 40 a 45 euros por servicio.
La tasa de 30 euros por prórroga de visado se mantendrá sin cambios para todos los solicitantes en cualquier escenario.
La UE pide opiniones
Se abre ahora un plazo de cuatro semanas para que los ciudadanos y residentes de la UE compartan sus opiniones sobre la validez de los ajustes de los precios de los visados.
La Comisión celebró debates preliminares sobre la revisión de las tasas en una sesión de un grupo de trabajo con expertos de los Estados Schengen el pasado mes de diciembre.
Una vez finalizado el periodo de comentarios el 1 de marzo de 2024, la UE puede pasar a adoptar oficialmente los nuevos costes de los visados.
Los cambios suelen entrar en vigor 20 días después de su publicación en el Diario Oficial de la Unión Europea.
Los requisitos del visado Schengen cambiarán con ETIAS
Además de la subida de precios, la UE ha hecho hincapié en sus planes para implantar un sistema de visados Schengen totalmente digital de aquí a 2028.
Los solicitantes presentarán toda la documentación en línea a través de una plataforma centralizada.
El bloque también reafirmó sus propuestas para un nuevo sistema previo al viaje denominado Sistema Europeo de Información y Autorización de Viajes (ETIAS).
Una vez puesto en marcha, los ciudadanos de más de 60 países exentos de visado tendrán que obtener permisos especiales antes de entrar en el espacio Schengen.
¿Recibirá respaldo público la revisión de las tasas de los visados Schengen?
Ante el aumento de los costes y los gastos generales de infraestructura, la UE considera justificado un aumento moderado tres años después del último ajuste de las tasas de visado Schengen.
La imposición de un precio más elevado a los países que no cooperen pretende impulsar una mayor colaboración en las políticas de control de la inmigración.
Las partes interesadas aún pueden expresar oficialmente su opinión sobre los cambios en las próximas semanas, antes de que las revisiones entren probablemente en vigor.
Las actualizaciones también acompañan a una mayor normalización de las normas de entrada de Schengen a través de los próximos esfuerzos de digitalización y el proyecto ETIAS.