El Gobierno griego intenta controlar el desarrollo desenfrenado del turismo

El Gobierno griego intenta controlar el desarrollo desenfrenado del turismo

El gobierno griego está introduciendo una nueva y estricta normativa sobre el uso del suelo en un esfuerzo por frenar el crecimiento excesivo del turismo y evitar la masificación en destinos populares de todo el país.

Muchas islas se enfrentan a severas restricciones de alquiler a corto plazo

Las nuevas políticas impondrán estrictas restricciones a los alquileres de corta duración en las regiones clasificadas como "saturadas" o "desarrolladas".

En las islas saturadas, que incluyen numerosos destinos como Mykonos, los alquileres de corta duración se limitarán a sólo 30 días al año.

Las zonas desarrolladas, como Atenas y Salónica, estarán limitadas a 60 días.

Además, los alquileres de corta duración estarán limitados a un porcentaje de las plazas hoteleras de cada unidad municipal.

El porcentaje exacto aún no se ha definido.

Incentivar el desarrollo de alto nivel en destinos consolidados

La normativa no prohíbe toda nueva construcción en zonas saturadas.

Su objetivo es fomentar la construcción de viviendas de lujo y la mejora de los hoteles y complejos turísticos de 4 y 5 estrellas.

También se incentivarán los proyectos de uso mixto con hoteles y viviendas.

Los inmuebles en desuso o ruinosos pueden verse obligados a renovarse o ser demolidos.

El objetivo es mejorar la calidad de la oferta turística en lugar de una expansión continua.

Nuevos complejos turísticos en islas deshabitadas

El plan permite nuevos complejos turísticos a gran escala en islas griegas deshabitadas.

Sin embargo, cualquier nuevo proyecto se enfrentará a importantes limitaciones de tamaño y proximidad a la costa.

La mayoría de las oportunidades se centrarán probablemente en islas más pequeñas cercanas al continente.

Mayor protección del medio ambiente

Para evitar los efectos del cambio climático, la distancia mínima a la costa aumentará considerablemente.

Los hoteles tendrán que alejarse al menos 150 metros, frente a los 50 metros actuales.

El aumento para las residencias es de 30 a 150 metros.

Además, se pondrá especial cuidado en proteger las zonas vulnerables a la subida del nivel del mar.

Prioridad a la reurbanización industrial en las grandes ciudades

Atenas y Salónica ofrecerán incentivos para convertir edificios industriales vacíos en nuevos alojamientos turísticos.

El objetivo es repartir mejor los visitantes entre los centros urbanos griegos.

Un despliegue cauteloso tras las dificultades del pasado

Los planes de ordenación del territorio se han enfrentado a importantes obstáculos en los últimos años, con múltiples propuestas rechazadas por los tribunales.

El Gobierno ha procedido con lentitud con la nueva normativa para evitar resultados similares.

Sin embargo, parece necesario actuar con valentía para controlar el turismo excesivo en los lugares más populares de Grecia.

La nueva normativa crea incertidumbre entre los viajeros de la UE

La normativa deja varios interrogantes abiertos para los visitantes de países de la Unión Europea (UE) que han disfrutado de fácil acceso a Grecia a través del sistema del Espacio Schengen.

El visado Schengen, los requisitos del ETIAS a partir de 2025 y otras políticas de inmigración pueden tener que adaptarse.

Para las vacaciones cortas en la ciudad, los límites a los alquileres a corto plazo en zonas saturadas podrían dificultar y encarecer la obtención de alojamiento.

Mientras tanto, las familias, los trabajadores a distancia, los estudiantes y otros viajeros de larga estancia se enfrentarán a la incertidumbre sobre su capacidad para residir en destinos populares bajo las nuevas restricciones.

A medida que avance la aplicación, la UE y Grecia tendrán que aclarar y garantizar la continuidad de los derechos de inmigración existentes en virtud de Schengen y las futuras políticas ETIAS.

Implicaciones complejas para la política de inmigración de la UE

En un plano más amplio, la normativa pone de relieve los complejos debates que se producen en la UE sobre el equilibrio entre los beneficios económicos del turismo y la sostenibilidad.

A medida que el turismo excesivo afecta a más ciudades e islas europeas, los responsables políticos se ven obligados a recalibrar las políticas de inmigración y viajes.

En los próximos años, iniciativas como ETIAS y las revisiones de Schengen podrían exigir a los turistas e inmigrantes de dentro y fuera de la UE más información sobre la duración de la estancia y el motivo del viaje.

El planteamiento de Grecia puede servir de modelo para que los Estados miembros incorporen la sostenibilidad a futuros marcos de inmigración.

Sin embargo, la cooperación a nivel de la UE será fundamental para garantizar la coherencia en todo el bloque y mantener aspectos fundamentales como la libertad de circulación.

La política de inmigración deberá actuar con cautela en estas cuestiones.

Equilibrio entre crecimiento turístico y sostenibilidad

La nueva normativa pone de manifiesto el difícil equilibrio necesario para gestionar el turismo en Grecia.

El sector aporta ingresos y puestos de trabajo inestimables, pero también amenaza con saturar los delicados ecosistemas insulares.

Al redirigir los flujos turísticos y limitar los alquileres de corta duración, el gobierno espera aliviar la presión sobre los principales destinos sin sacrificar los beneficios económicos.

El éxito de estas políticas dependerá de una aplicación meditada y de la cooperación de las autoridades y empresas locales.

Si se ejecuta con prudencia, el plan podría convertirse en un modelo de gestión sostenible del turismo en otros lugares del Mediterráneo que se enfrentan a problemas similares de masificación.

Con cuidado, Grecia puede acoger a visitantes de todo el mundo y preservar sus pueblos, islas y costas para las generaciones futuras.