La UE alcanza un acuerdo para reformar las políticas de asilo y migración

La UE alcanza un acuerdo para reformar las políticas de asilo y migración

Los representantes de los Estados miembros de la Unión Europea (UE) han aprobado un acuerdo provisional alcanzado en diciembre de 2023 entre la Presidencia del Consejo y el Parlamento Europeo sobre la reforma del sistema de asilo y migración de la UE.

El Nuevo Pacto sobre Migración y Asilo pretende mejorar la solidaridad entre los Estados miembros y hacer más eficaz el sistema en su conjunto.

El Pacto afecta a todos los ámbitos de la migración

El pacto de reforma abarca cinco actos legislativos fundamentales que afectan a todas las facetas de la gestión de la migración, desde los controles en las fronteras exteriores hasta los procedimientos de solicitud de asilo.

Un reglamento Eurodac revisado mejorará el control de los movimientos de los solicitantes de asilo dentro de la UE actualizando la base de datos de huellas dactilares del bloque.

El nuevo reglamento de control también se centra en la seguridad de las fronteras al garantizar la rápida identificación y tramitación de los inmigrantes que entran ilegalmente.

Agilización de los procedimientos de asilo

Quizá lo más significativo sea que el Reglamento provisional sobre el procedimiento de asilo (RPA) pretende sistematizar y agilizar el proceso de asilo.

Introduce procedimientos fronterizos obligatorios para evaluar rápidamente las solicitudes potencialmente infundadas o inadmisibles.

El Reglamento de Gestión del Asilo y la Migración (AMMR), que lo acompaña, pretende distribuir más equitativamente la responsabilidad de las solicitudes de asilo entre los Estados miembros.

El marco de crisis permite flexibilidad

Un quinto componente establece un marco de crisis de emergencia de la UE para que los países puedan ajustar temporalmente las normas si la afluencia desborda su capacidad, al tiempo que solicitan medidas de solidaridad a la UE y a los demás Estados miembros.

Acuerdos anteriores sobre reasentamiento y acogida

Junto al pacto, los representantes de la UE reafirmaron acuerdos anteriores de 2022 por los que se revisaban las directivas sobre condiciones de acogida de refugiados y criterios de cualificación para la protección.

También se renovó un reglamento marco sobre reasentamiento para facilitar la reubicación organizada de los solicitantes de asilo en toda la región.

Próxima fase: Adopción por el Parlamento y el Consejo

Una vez aprobadas por los representantes nacionales, las reformas pasan ahora a su adopción formal por el Parlamento Europeo y el Consejo en pleno.

Si se ratifican como se espera, las medidas transformarán radicalmente la respuesta del bloque a la migración y el asilo.

El éxito depende de la aplicación

Las reacciones al acuerdo provisional fueron prudentemente optimistas.

Nicole de Moor, Secretaria de Estado belga de Asilo y Migración, admitió que las ramificaciones podrían no ser inmediatas.

Sin embargo, elogió el pacto por obligar a los Estados miembros a mejorar.

La verdadera prueba será la diligencia con que los países apliquen los nuevos procedimientos normalizados.

Las nuevas normas agilizarán la entrada de visitantes

Para los viajeros a la UE, incluidos los que necesitan visado Schengen, las reformas apuntan a un tratamiento más coherente y eficaz en las fronteras y a procedimientos de solicitud normalizados.

Al estar obligados los Estados miembros a adherirse a la normativa de todo el bloque en virtud del pacto, los visitantes podrían encontrarse con menos incoherencias frustrantes según el país de llegada.

El próximo Sistema Europeo de Información y Autorización de Viajes (ETIAS), que se pondrá en marcha a mediados de 2025, también pretende aclarar la situación de los visitantes exentos de visado antes de viajar.

Si los cambios combinados tienen éxito, podrían facilitar los viajes de turistas y hombres de negocios y mejorar la supervisión de las autoridades.

Las políticas nacionales siguen marcando la realidad de la inmigración

Aunque su alcance es crucial, el acuerdo migratorio de la UE no sustituye la autoridad soberana de los Estados miembros sobre las políticas básicas de inmigración.

Las reformas se centran en las solicitudes de asilo y la seguridad fronteriza más que en la inmigración a largo plazo.

Los programas de inmigración económica, como los visados para inversores o los visados para nómadas digitales, seguirán variando mucho de un país a otro dentro de la UE.

La gran excepción son los refugiados y los solicitantes de asilo.

Si se aplican correctamente, unas normas estandarizadas para toda la UE podrían acelerar y mejorar enormemente sus experiencias de reasentamiento.

Sin embargo, para la mayoría de los inmigrantes, navegar por la complejidad sin cambios de 30 regímenes nacionales de inmigración sigue siendo el statu quo.

La clave está en la aplicación

El amplio acuerdo de reforma de la inmigración y el asilo representa un hito para la UE, con procedimientos normalizados en todos los Estados miembros para mejorar la eficacia, la seguridad y el reparto de cargas.

Sin embargo, el éxito del nuevo régimen dependerá en última instancia de la fidelidad con que los países apliquen en la práctica la normativa mejorada.

Lograr la uniformidad en la tramitación de las solicitudes de asilo y los cruces irregulares de fronteras entre 30 gobiernos nacionales supone un reto permanente.

Si los objetivos del pacto se materializan, el bloque puede estar mucho mejor equipado para gestionar futuros flujos migratorios.

Sin embargo, el camino de la política a la aplicación en el mundo real suele ser difícil.