Un informe de la Guardia de Fronteras polaca revela la magnitud de los cruces de inmigrantes procedentes de Bielorrusia

Un informe de la Guardia de Fronteras polaca revela la magnitud de los cruces de inmigrantes procedentes de Bielorrusia

Un informe interno de la guardia de fronteras polacarevela que los intentos de migrantes y solicitantes de asilo que cruzan desde Bielorrusia a Polonia y los países bálticos vecinos siguen siendo elevados, con más de 17.800 casos detectados en Polonia en lo que va de año.

Aumento de la presión en la frontera entre Polonia y Bielorrusia

Los datos que abarcan del 1 de enero al 17 de septiembre de 2023 muestran más de 17.800 casos de migrantes que intentaron o lograron cruzar irregularmente desde Bielorrusia a Polonia, más del doble de la cifra de 2022 para el mismo periodo.

A la mayoría se les impidió la entrada, con más de 16.000 casos registrados.

Se detuvo a casi 400 migrantes y se ordenó abandonar Polonia a más de 1.200 personas, principalmente sirios y afganos.

La barrera fronteriza de Polonia con Bielorrusia pretende frenar estos cruces desde su finalización en 2022.

Sin embargo, los críticos sostienen que las elevadas cifras actuales muestran que la barrera sigue teniendo "goteras".

La guardia fronteriza de Polonia insiste en que ha sido eficaz en la detección y prevención.

Viajes hacia Alemania

El informe también da indicios de que muchos migrantes siguen hacia Alemania tras entrar en Polonia desde Bielorrusia.

Alrededor de 500 fueron capturados en la frontera polaco-alemana, mientras que cerca de 13.000 detenidos en Alemania cerca de la frontera polaca se consideró que probablemente habían entrado desde Bielorrusia.

Los flujos migratorios se desplazan entre las fronteras bálticas

Los intentos de entrada desde Bielorrusia disminuyeron en Lituania en términos interanuales, pero aumentaron significativamente en Letonia, lo que sugiere cambios en los flujos a lo largo de las fronteras bálticas.

Más de 1.600 personas fueron detenidas en la frontera entre Lituania y Bielorrusia y más de 8.700 en Letonia.

Los controles fronterizos alemanes provocan una respuesta más amplia

Ante el aumento de las entradas detectadas en Alemania, Berlín puso en marcha controles temporales de las llegadas desde Polonia y la República Checa el pasado mes de septiembre.

Esto desencadenó medidas similares por parte de Polonia en su frontera con Eslovaquia en octubre.

Los viajeros se enfrentan a más controles fronterizos

Con la aplicación de controles fronterizos adicionales en varios países, los visitantes de Europa que planean viajes a varios países se enfrentan a más posibilidades de retrasos y trastornos.

Quienes dependan del espacio sin fronteras de Schengen para hacer turismo, estudiar en el extranjero o viajar por negocios deben prever controles más estrictos de documentos y seguridad. Las colas en las fronteras y los tiempos de espera podrían aumentar.

El próximo lanzamiento en 2025 del Sistema Europeo de Información y Autorización de Viajes (E TIAS) también significa que los viajeros a Europa necesitarán una aprobación previa en forma de exención de visado ETIAS.

Con la inestabilidad en curso, garantizar que las solicitudes del ETIAS se examinan a fondo antes de la entrada será probablemente una prioridad.

Políticas bajo presión

Mientras los Estados de la UE luchan por salir adelante, podrían producirse reformas de la política migratoria para reforzar las fronteras exteriores y armonizar los sistemas de tramitación.

Los países situados en primera línea podrían presionar a los demás Estados miembros para que presten más ayuda con las solicitudes de asilo o el reasentamiento mediante sistemas de cuotas.

Los países que aplican controles fronterizos temporales han insistido en que se trata de un último recurso para hacer frente a presiones repentinas.

Sin embargo, dado que algunos controles ya se han prolongado repetidamente, no se pueden descartar por completo cambios permanentes en el acceso sin pasaporte a Schengen si los problemas persisten a largo plazo.

También podrían realizarse esfuerzos para agilizar y acelerar la tramitación de las solicitudes de asilo, las expulsiones de las solicitudes fallidas y la aplicación del ETIAS para el control de los viajeros antes de su llegada.

Un camino a seguir

Los acontecimientos demuestran que el "ataque híbrido" de Bielorrusia, consistente en fomentar la inmigración irregular en la Unión Europea (UE), sigue ejerciendo presión sobre las fronteras europeas y las relaciones entre los Estados miembros.

Aunque barreras como la polaca impiden muchos cruces, las continuas presiones y movimientos dentro del espacio Schengen sin fronteras de Europa ponen a prueba la cooperación y provocan respuestas unilaterales.

No hay indicios de que la situación vaya a remitir pronto, por lo que parece que la crisis seguirá poniendo a prueba la solidaridad y el ingenio europeos.